En AMANSH, nuestro compromiso con la calidad, la cultura y la artesanía se refleja en cada prenda que creamos. Una figura clave detrás de esta magia es Evelyn, la persona talentosa y dedicada que supervisa nuestra colección de ropa hecha en Guatemala. Durante los últimos dos años, Evelyn no solo se ha convertido en una parte indispensable de nuestro equipo, sino también en un símbolo de resiliencia y pasión.

Un viaje nacido de los sueños de la infancia

El viaje de Evelyn al mundo de la producción de ropa es tan inspirador como las hermosas prendas que crea. Desde pequeña quedó cautivada por el arte de la costura, pasión que le encendió su madre cuando apenas tenía 9 años. Evelyn cuenta: "El sueño comenzó en mi patio trasero cuando mi madre me enseñó a coser a mano. Me dio ropa que ya no usaba y ahorré para comprarme una muñeca de plástico. Pasaba horas haciendo vestidos y, junto con mi amiga, Naty, que tenía muñecas Barbie originales, yo le hacía ropa a sus muñecas y la vendía en el colegio. Siempre me ha encantado este arte".

Su trayectoria formal en la industria comenzó cuando su hija menor tenía 2 años. Evelyn quería vestirla con hermosos vestidos hechos a mano. Aunque conocía lo básico, no fue hasta 2008 que decidió convertir su pasión en una profesión.

Un mensaje para nuestros valiosos clientes

La dedicación de Evelyn a su oficio es evidente en cada pieza que crea. Su mensaje a quienes visten sus creaciones es sentido y profundo: "Las prendas no son sólo ropa; son parte de nuestra identidad. La moda no es sólo lo que ves en revistas y grandes superficies; es también la reconstrucción de una cultura. Es un arte, y en cada prenda hecha por mis manos viene la pasión, la dedicación, el amor y el detalle de una pieza artesanal, con la intención de que cada prenda sea única y especial, como la persona que la usará."

Superar desafíos con gracia

Al equilibrar su carrera, maternidad y educación, Evelyn se ha enfrentado a numerosos desafíos. Uno de los mayores obstáculos ha sido lograr el reconocimiento de las prendas hechas a mano en un mundo dominado por la moda rápida. Explica: "Conciliar mi pasión con ser madre y profesional, hacer creer en una prenda hecha a mano y no manufacturada, y afrontar la moda rápida, que tiene mayor impacto que las prendas confeccionadas en un pequeño taller de costura, han sido retos importantes".

La perseverancia y el amor de Evelyn por su oficio la han ayudado a superar estos obstáculos. "He superado cada situación con fuerza de voluntad y amor por lo que hago, sabiendo que Dios no abandona a quienes se esfuerzan por superarse. También he hecho alianzas sólidas con personas que confían en mí para llevar a cabo sus proyectos. Se convierte en un trabajo de equipo. porque hacerlo solo es un poco más complicado. Lo más importante es que creo que las oportunidades tienen una razón de ser", comparte.

Celebrando el arte de coser

Para Evelyn, coser es mucho más que simplemente cortar y coser telas. Se trata de entender el material, tratarlo con mimo y transformar ideas en creaciones tangibles y únicas. Ella enfatiza: "Coser no es sólo cortar y coser, es mucho más que eso. Se trata de conocer el tejido, tratarlo con mimo y darle vida a una idea de una manera única, como cada cuerpo". totalmente diferente, y haciéndolo funcional para cada persona."

La historia de Evelyn es un testimonio del poder de los sueños, la dedicación y la belleza de la artesanía. En AMANSH, estamos increíblemente orgullosos de tenerla liderando nuestra colección guatemalteca, infundiendo en cada pieza su pasión y experiencia. Su viaje nos inspira a todos y enriquece el alma de nuestra marca.

Cuando compras una pieza de nuestra marca, no solo obtienes una prenda única y hecha a mano, sino que también apoyas nuestro viaje y ayudas a Evelyn a lograr sus sueños. Su apoyo nos permite seguir creando ropa hermosa y significativa y permite a Evelyn equilibrar sus roles como profesional dedicada, estudiante universitaria y amorosa madre de dos hijos. Gracias por ser parte de nuestra historia.